"De todas las historias de la Historia sin duda la más triste es la de España", escribía Gil de Biedma.
Partiendo de unas cuartillas que su padre dejó escritas antes de morir, el guionista Antonio Altarriba recrea la vida de éste, que abarca casi todo el siglo XX español. Padre e hijo se funden en un solo narrador para contar historias que a todos nos suenan familiares: las duras condiciones del campo, la guerra civil, el exilio, el franquismo, la transición, el desencanto… La obra tiene la fuerza y la credibilidad de los hechos reales, salpicados con otros ficticios que la dotan de ritmo y a veces incluso de humor, a pesar de que la sensación que deja en el lector es la del verso que he citado al principio.
Kim es un dibujante más que cumplidor, y se agradece el grado de detalle y la cuidada ambientación que aporta, pero juega en su contra que se le relacione tanto con su trabajo en El Jueves. Al menos a mí me ha pasado…
Este cómic se ha convertido desde su aparición en un clásico instantáneo, y yo estoy de acuerdo, sin duda es lo mejor que se ha hecho en este país en mucho tiempo, además de una lección de Historia que bien podría leerse en los institutos.