viernes, 6 de junio de 2008

No me dejes nunca

En los años 20 del pasado siglo París era una fiesta, y por sus calles transitaban multitud de artistas, muchos de ellos anglosajones: Hemingway (este apellido es el título original de la obra), Scott Fitzgerald, Ezra Pound, James Joyce… ellos son los protagonistas de esta historia, transfigurados en perros y pájaros antropomorfos, y con otro importante cambio: no se dedican a la literatura, sino a hacer tebeos. Así, en las primeras páginas asistimos a la relación que mantienen los personajes entre sí, jugando con las personalidades reales de los artistas, reflexionando sobre el arte y las posibilidades del cómic como forma artística.

Hacia la mitad, la historia da un giro para convertirse en una trama de serie negra narrada desde distintos puntos de vista; una difícil pirueta de la que Jason sale airoso facturando un guión sobresaliente que ofrece mucho en pocas páginas, acompañándolo de un dibujo sencillo, pelín frío, y una composición repetitiva (nueve viñetas idénticas por página) que se acoplan perfectamente al texto.

2 comentarios:

Kazike dijo...

Hola!

Muy interesante. Normalmente (como ya sabes) no manejo apenas este tipo de cómics, y realmente es porque casi nunca sé qué escoger... es difícil ser valiente con el poder adquisitivo de un estudiante y los precios de las editoriales.

Espero que me eches un cable y que me ayudes a poco a poco meterme en el mundillo :)

Un abrazo!

Redwine dijo...

Te voy a preparar un plan de lecturas que va a hacer de ti un auténtico gafapasta xD
No, no quiero pasarme, espero dejarte cómics que te diviertan y sean a la vez mmm.. ¿didácticos? para que puedas escoger luego según tus gustos. Por desgracia no tengo aquí el grueso de mi colección, pero sí cosas muy interesantes, ya verás.

Un abrazo!