jueves, 13 de noviembre de 2008

Medea

Medea había puesto mucho de su parte en su relación con Jasón el argonauta: por amor a él traicionó a su padre para conseguir el vellocino de oro, provocando además la muerte de su hermanastro; por amor a él renunció a su patria y le dio tres hijos. Jasón la convirtió en su esposa y le juró amor eterno.

Una vez establecidos en Corinto, Jasón decidió que le iría mejor si abandonase a Medea y se casara con la hija del rey Creonte… Despechada y ante un inminente destierro, poseída por el odio y los celos, Medea monta en cólera y planea la venganza más cruel contra Jasón. Y aunque vacila, termina por llevarla a cabo.

De los tres grandes trágicos griegos, se dice que Eurípides es el más "moderno". Sus personajes son más complejos psicológicamente, más humanos. También se atreve a criticar la sociedad de la época, y en sus obras no hay tanta intervención divina como en las de sus predecesores, quizá porque en aquel tiempo la fe en los dioses estaba siendo puesta en duda por los sofistas, y también por su contemporáneo y amigo Sócrates, que al parecer sólo iba al teatro cuando estrenaban una de Eurípides.

Uno de los rasgos más relevantes de su obra es la importancia que da a los personajes femeninos, como Medea. Es conocida la misoginia de casi todos los hombres hasta bien entrado el siglo XX, y Eurípides no es una excepción. Sin embargo, hay quien cree que el papel de la mujer en la tragedia griega proviene del recelo masculino hacia una presunta "Edad del matriarcado" anterior. Sobre ello abunda este interesante artículo que he encontrado, aunque sus conclusiones son discutibles.

Lo cierto es que es curioso que muchos de los grandes personajes de la tragedia griega sean mujeres (y de armas tomar, como Medea o Antígona), cuando ellas no podían actuar, y durante mucho tiempo ni siquiera asistir a las representaciones.

2 comentarios:

Katrina Van Dassos dijo...

¿Y qué hay de "asamblea de mujeres" de Aristófanes? Ese era un feminista progre de pro. ajjaajja.

No he leído a Eurípides todavía, es el que me falta del tridente.

PD: En serio, que le tengo que encontrar.
Buscando a Mescalito en los garitos...

Redwine dijo...

Creo que Aristófanes se llevaba fatal con Eurípides, y le dedica bastantes puyazos en sus obras...

Me leeré un par más de Eurípides y me lanzaré al "Asamblea..."