viernes, 8 de febrero de 2008

Metralla

No sé si habrá influido el éxito de Persépolis para la publicación en estas latitudes de otra autora “exótica”, en este caso la israelí Rutu Modan, que al igual que Satrapi está cosechando muy buenas críticas. De cualquier modo, son tebeos muy diferentes: el escenario de Metralla es Tel-Aviv, pero narra una historia de relaciones humanas que podría ocurrir en cualquier otro lugar del mundo.

Las referencias a la política son secundarias e irónicas, la sencillez aparente del dibujo y el color en tonos pastel le da un aire casi naif que nos acerca al interior de los personajes más que al convulso país que los rodea. A pesar de todo ello, el desencadenante de la acción es un atentado, algo casi cotidiano en Israel.

Numi, una joven de buena familia, cree que su desaparecido amante, un hombre mucho mayor que ella, ha podido ser una de las víctimas de la masacre cuyo cuerpo no ha sido identificado. Para confirmarlo recurre a Kobi, el hijo de su amante; pero Kobi está peleado con su padre y hace años que no sabe nada de él. Juntos, Numi y Kobi emprenden una búsqueda que forjará vínculos entre ellos, y hará que Kobi reflexione sobre la figura paterna, aclarando sus sentimientos.

Ni más ni menos. Una historia clásica de búsqueda y desarrollo personal, perfectamente hilvanada hasta desembocar en una bonita escena final.

2 comentarios:

Elisa McCausland dijo...

A mi me encantó Metralla. Me gustó el dibujo de ella, nada sexualizado, y la historia de ambos. Un extraño amor...

Redwine dijo...

Pues si, en este tipo de historias creo que ayuda que los personajes tengan un físico "normal".

Siempre pongo el ejemplo del cine y la adaptación de From Hell: una historia oscura y desoladora sobre prostitutas sucias y desdentadas de finales del siglo XIX, que en la peli protagoniza... Heather Graham (¡!) recién salida de la peluquería. Vamos anda!!