Tangencias se compone de ocho historias cortas realizadas entre 1987 y 1995 para las revistas Cimoc y Cairo, todas ellas protagonizadas por parejas que se citan para hacer el amor. Pero sus relaciones serán sólo tangenciales, ya que su distanciamiento emocional o sus visiones divergentes de la vida pueden más que la atracción física. Así, todas las historias tienen un tono melancólico, y un final triste.
Miguelanxo Prado ha sido posiblemente el artista de cómic más destacado de este país en los últimos años, y es sin duda la piedra angular del cómic gallego actual. Su estilo de dibujo es inconfundible, y en esta obra lo pone al servicio de atmósferas íntimas y poéticas, luciéndose más que en otros trabajos más ligeros. El peso de la narración descansa sobre primeros planos, gestos, diálogos, y el uso de colores otoñales: el sepia, el gris y el azul.
¿Mi historia favorita? Quizá Deidades ociosas, por razones sentimentales: es la única que ya había leído, hace mil años, en un Cairo.
Miguelanxo Prado ha sido posiblemente el artista de cómic más destacado de este país en los últimos años, y es sin duda la piedra angular del cómic gallego actual. Su estilo de dibujo es inconfundible, y en esta obra lo pone al servicio de atmósferas íntimas y poéticas, luciéndose más que en otros trabajos más ligeros. El peso de la narración descansa sobre primeros planos, gestos, diálogos, y el uso de colores otoñales: el sepia, el gris y el azul.
¿Mi historia favorita? Quizá Deidades ociosas, por razones sentimentales: es la única que ya había leído, hace mil años, en un Cairo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario