miércoles, 27 de febrero de 2008

Tragedias completas de Esquilo

El teatro evolucionó a partir de ritos religiosos en los que escenas de la vida de los dioses (especialmente Dionisos en el caso griego) eran representadas por el coro. Parece que fue Tespis (cuya obra se ha perdido) quien introdujo a un protagonista para dialogar con el coro, hasta que Esquilo dio un paso más allá, poniendo en escena coro, protagonista y antagonista.

De sus cerca de noventa tragedias, que el autor solía agrupar en trilogías, sólo siete han llegado a nuestros días, y sólo una de las trilogías se ha conservado intacta, la Orestía. Mientras leía el libro trataba de imaginarme la extraordinaria impresión que tuvo que producir el teatro en sus primeros espectadores, ya que incluso hoy en día, como dice la contraportada: “A pesar del paso de los siglos, son obras que siguen afectando el ánimo del espectador –o lector.”

-Los Persas trata del dolor del pueblo persa tras la derrota en Salamina, batalla en la que participó el propio Esquilo, que en la obra da voz al enemigo sin ridiculizarlo ni despreciarlo, aunque su objetivo sea destacar la superioridad ateniense.

-Los siete contra Tebas nos habla del asedio de la ciudad por el ejército de Argos, y del enfrentamiento entre los dos hijos de Edipo: Etéocles, que defiende Tebas, y Polinices, que intenta invadirla. La lucha entre hermanos estaba escrita y ellos saben que no pueden luchar contra el destino impuesto.

-Las suplicantes son las cincuenta hijas de Dánao (también llamadas danaides), que por estar obligadas a casarse con los hijos de Egipto huyen a Argos, donde consiguen protección.

-La Orestía es una trilogía centrada en la maldición que pesa sobre la casa de Atreo. Sus tres partes son las más disfrutables de entre los textos esquíleos: son emocionantes y están llenas de intrigas, ambición y dramatismo.

En la primera obra, Agamenón, el héroe vuelve a casa tras diez años ausente en la guerra de Troya, sin sospechar que su mujer Clitemnestra le ha sido infiel con Egisto, y que ambos planean asesinarle. El personaje de Clitemnestra está especialmente bien construido, es una “mala” de antología.

En Las Coéforos el protagonista es el hijo de Agamenón, Orestes, quien junto a su hermana Electra planea vengar el asesinato de su padre. Y lo consigue, pero no sin consecuencias.

En Las Euménides Orestes es juzgado por su crimen, resultando absuelto gracias a la mediación de Apolo. Según algunos estudios, en este juicio se defiende lo patriarcal frente al antiguo culto a deidades femeninas, ya que Apolo reduce la figura materna a un receptáculo para la semilla masculina.

A estas tres obras seguía un drama satírico, Proteo, que aliviaba la tensión del público, pero lamentablemente se ha perdido.

-No es seguro que Prometeo encadenado sea obra de Esquilo, algunos expertos la consideran posterior a su época; no obstante, está incluida en todas las ediciones de sus tragedias que he visto.

Por haber ofrecido el fuego a los hombres, Prometeo es castigado por Zeus: encadenado a una roca, y mientras espera que llegue el águila que ha de picotearle el hígado, ante el titán desfilan una serie de personajes que se apiadan de su desgracia y le aconsejan pedir la clemencia de Zeus. Pero Prometeo es obstinado.

Y para terminar, no me resisto a copiar de la Wikipedia las causas tragicómicas de la muerte de Esquilo:


Poco antes de su muerte, el oráculo le vaticinó que moriría aplastado por una casa, por lo que decidió residir fuera de la ciudad. Curiosa, y trágicamente, falleció al ser golpeado por el caparazón de una tortuga, que fue soltado por un quebrantahuesos desde el aire.

1 comentario:

Tato dijo...

Muchisimas Gracias este Argumento de ustedes me servira mucho para el colegio.

Solo opino que es una buena obra, pero es demasiado aburrida y sus dialogos son casi incomprensibles en su forma de hablar.Tambien hay demasiado dialogo de un sol personaje.