lunes, 27 de agosto de 2007

Correspondencias


DON FARRUQUIÑO.–Cada vino reclama su sacramento. Rueda blanco, propio para acompañar una tortilla de chorizos. Espadeiro de Salnés, bueno para refrescar en el monte, o en una romería o en un juego de bolos. Ribero de Avia, para las empanadas de lamprea y las magras de Lugo. Cada vino tiene su correspondencia en la vida, igual que todas las cosas. El mundo es armonía y concierto pitagórico. ¡Y nadie me rebata, si no está ordenado de teólogo!

CARA DE PLATA.–¡Cómo se conoce que andas entre abades!

Ramón del Valle-Inclán, Cara de Plata

No hay comentarios: